EL SEÑOR DE LOS CRÁNEOS
Hiende la tierra
con sus pies de muerte,
sonríe con horror
pintado en sus labios cadavéricos,
sus dedos se agitan,
removiendo el aire y la niebla
para crear una pócima absorbente,
compuesta de almas y de llantos.
El señor de los cráneos
tiene un cuerpo retorcido,
girones de vidas pasadas,
de almas consumidas,
de eones vividos.
El señor de los cráneos
se regodea en el sufrimiento y el dolor,
gusta de beber
sorbos de sangre con llantos,
la sinfonía de las lágrimas
su favorita es,
y la escucha sentado
en su sillón de huesos,
apoyados los pies
en un escabel de calaveras,
tapizados los muebles
con piel empapada en sangre,
recién desollada.
El señor de los cráneos
vive en un palacio
hecho con las cabezas de sus víctimas,
devorador de almas y consumidor de eternidad,
separado de este mundo
por una puerta de cristal
ante la que hace guardia
mientras el odio
brilla en las hogueras de sus ojos,
aguardando el momento
en que se abra el pórtico
y pueda volver a pasar
a nuestro mundo.
El señor de los cráneos
aguarda su momento
mientras devora un nuevo espíritu,
alma en perpetua digestión en sus entrañas,
y su ejército de espectros aguarda tras él,
prestos a cruzar mundos.
Y,
cuando cruce,
el horror
le seguirá...
© Copyright 2014 Javier LOBO
1 comentarios:
Tienes mucha imaginación, creas personajes increíbles y tétricos que cobran vida en estos renglones..Saludos
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